Guía para la Construcción de un Estante de Madera
Construir un estante de madera puede ser un proyecto gratificante y satisfactorio. A continuación, te presentamos un proceso detallado para que puedas llevar a cabo esta tarea con éxito.
Preparación del Material
Comienza dimensionando el material necesario. A continuación, perfila los paneles finales, los paneles posteriores y el estante inferior utilizando una sierra de cinta. Para darle un acabado atractivo al borde superior, utiliza un moldeador o un enrutador montado en la mesa con los cortadores adecuados. Después, procede a cortar la carpintería. Puedes realizar la ranura detenida que sostendrá los extremos del panel posterior utilizando una rebajadora montada en la mesa o manualmente con cinceles.
Corte de Mortajas y Espigas
El siguiente paso es cortar las mortajas pasantes en los paneles finales. Luego, con una sierra o una pila de cortadores de dados en la sierra de mesa, corta las espigas en los extremos del estante inferior para que se ajusten perfectamente a estas mortajas. En el torno, gire las dos clavijas estilo Shaker y colócalas en las mortajas perforadas en el panel posterior del estante. Una vez que todas las piezas estén ensambladas en seco y verificado su ajuste, procede a pegar el marco y atornillarlo. Para instalar la parte superior, utiliza cuatro tornillos para madera de 1″ n.º 6, que deben pasar a través de la parte superior al grano final de los paneles laterales. Finalmente, pega cuatro tapones de arce y golpéalos en los orificios de los tornillos avellanados.
Entendiendo el Grano de la Madera
En el Diccionario del carpintero de Vic Taylor, se define el término «curlis» como un grano altamente calculado que se obtiene al cortar la unión de un árbol o una rama grande. Este tipo de grano se utiliza únicamente en forma de chapa y también se conoce como entrepierna o pluma.
Consideraciones sobre la Madera Rizada
Si decides ordenar material rizado a un proveedor estadounidense de madera labrada, es importante tener en cuenta que no siempre recibirás el material descrito por Vic Taylor. En su lugar, podrías obtener madera marcada por ondulantes barras de grano que cruzan las tablas de manera perpendicular a la dirección del grano. Esta inconsistencia en la terminología no solo se presenta entre distribuidores de diferentes países, sino también entre aquellos que operan en los EE. UU.
Un operador de aserraderos que conozco tiene su propio sistema de clasificación de madera labrada: si se rompe en la cepilladora, es rizado. Así de simple. Aunque yo inspecciono cuidadosamente cada tabla rizada que le compro, un cliente nuevo podría asumir que lo que ha adquirido exhibirá una figura consistente de tablero a tablero, lo cual no siempre es el caso.
La Realidad de los Pequeños Aserraderos
En general, he observado que los propietarios y operadores de pequeños aserraderos no son las mejores fuentes de madera aserrada. Esto puede deberse a que son aserradores y no trabajadores de la madera, lo que les lleva a ver la madera desde una perspectiva diferente. Además, muchos de ellos carecen de la experiencia necesaria para hacer juicios informados sobre la calidad de la madera que ofrecen.
Mantenimiento Forestal y Calidad de la Madera
En algún momento, todos los que trabajan con herramientas en la madera deben considerar el tema del mantenimiento forestal. Aunque muchos expertos creen que las reservas de especies americanas comunes son suficientes para satisfacer las necesidades futuras, la calidad del material disponible ha disminuido. Aunque el cerezo, el arce y el roble son fáciles de encontrar en un aserradero bien abastecido, los tableros no son tan anchos ni tan claros como lo eran hace solo una generación. La situación es aún más crítica para el nogal, que se ha convertido en una de las maderas duras más escasas en EE. UU. Los troncos de nogal son cada vez más difíciles de encontrar, y cuando se localizan, suelen ser adquiridos rápidamente por las fábricas de chapas.
Con esta guía, estarás mejor preparado para abordar tu proyecto de estante de madera, asegurándote de elegir los materiales adecuados y de comprender la calidad de la madera que estás utilizando. ¡Manos a la obra!